Ocio Valioso Recreativo como ámbito de sentido
Junko Takahashi, en su obra El método japonés para vivir 100 años (2017), al estudiar las razones que han favorecido la superación de las diez décadas a un crecido número de japoneses, encuentra que una de ellas fue el cultivo de sus aficiones. Según afirma, es algo que les dio «un sentido para continuar sus vidas» a muchos centenarios. Esta constatación le lleva a afirmar que es muy importante que cada persona haga aquello que de verdad le guste y colme sus expectativas. Eso mismo es lo que yo pienso cuando investigo o constato el ocio de los jubilados. Por desgracia no todos los que se ocupan de estudiar esta etapa de la vida creen lo mismo. Quiero pensar que eso se debe a la falta de educación relacionada con el ocio y a la ignorancia de los conocimientos que se tienen sobre el tema. Los Estudios de Ocio no han alcanzado la difusión que debieran en esta sociedad del siglo XXI.
Los últimos estudios sobre valores realizados en la Unión Europea, que se recogen en el Atlas of european values (2008), dejan bien claro que ocio y tiempo libre son valores muy o bastante importantes en las vidas de los europeos. El 89% de los ciudadanos, en el caso de Portugal, y 91%, en el de España. A unas conclusiones parecidas hemos llegado en nuestro Instituto de Estudios de Ocio, tras varias invesgaciones llevadas a cabo en ese centro de las que doy cuenta en mi libro Ocio Valioso (Cuenca, 2014).
Ni las investigaciones aludidas, ni los testimonios que aparecen en ellas hablan de sentido, pero en todos los casos se refieren al ocio y el tiempo libre como un ámbito de valor muy importante. ¿Podríamos decir que aquello que nos interesa y nos importa no tiene ningún sentido para nosotros? El ocio valioso se asocia a lo que despierta tu interés y te invita a descubrir algo más allá. Haruki Murakami, en su libro De qué hablo cuando hablo de correr, afirma: «Para mí, correr, al tiempo que un ejercicio provechoso, ha sido también una metáfora útil. A la par que corría día a día, o a la vez que iba participando en carreras, iba subiendo el listón de los logros y, a base de irlo superando, el que subía era yo. (…) Ni que decir tiene que no soy un gran corredor. Mi nivel es extremadamente corriente (…). Pero eso no es en absoluto importante. Lo importante es ir superándose, aunque solo sea un poco, con respecto al día anterior. Porque si hay un contrincante al que debes vencer en una carrera de larga distancia, ése no es otro que el tú de ayer» (Murakami, 2010: 24).
El ocio valioso se reconoce porque no busca llenar tu tiempo sino realizarte, superarte y desarrollarte como persona. De ahí que me guste afirmar que ha de ser un ocio que nos acompañe hasta el final de nuestros días.
Manuel Cuenca Cabeza: 28/04/2019